Un motel de lujo inspirado en los 'love motels' de la Ruta 66: desde su imponente letrero de neón hasta los clásicos balcones, tan característicos de los moteles de carretera estadounidenses.
Situada en el aparcamiento se encuentra la capilla para bodas, que sin duda será uno de los lugares más comentados y fotografiados del establecimiento.
El comedor invita a entrar en un hotel envuelto en un seductor ambiente setentero, con reservados y mesas en las que se sirven hamburguesas, refrescos y batidos, junto con todos los elementos icónicos imaginables.
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