La ciudad más grande de Marruecos
Tras un vuelo a Casablanca, se aterriza en la ciudad más grande de Marruecos en términos de población. Se encuentra a orillas del océano Atlántico, a 80 kilómetros al sur de la capital del país, Rabat. Se trata del centro económico y comercial del país, y la mayor de las ciudades de todo el Magreb. Sus orígenes se remontan al siglo XI, en época de los zenetas, y debe su aspecto actual a la reconstrucción que en el año 1770 realizó el sultán Mohamed Ben Abadía: en esa época adquiere su mezquita, su madraza y su hammam.
Los rincones de la ciudad imprescindibles
Al acercarse por aire mediante los vuelos a Casablanca, se puede observar desde el avión su principal atractivo turístico: la mezquita Hassan II. Se sitúa cerca del puerto y sobre la playa, y cuenta en lo alto de su minarete con un rayo láser visible a 30 kilómetros y que indica el camino a La Meca. La entrada cuesta 120 dirham, y es posible acceder a una visita guiada a las 9:00, 10:00, 11:00 y 14:00 horas. Después de un vuelo a Casablanca, es obligatorio visitar Medina, el casco antiguo, donde destaca la Torre del Reloj, la mezquita de Ould el Hamra y la iglesia de la misión española de San Buenaventura. Fuera de la Medina se pueden admirar numerosos edificios de estilo art déco, de influencia francesa.
Descubrir el exotismo de la comida marroquí
La cocina de Casablanca es muy variada, pero hay un plato que impera sobre los demás, y por el que merece la pena encontrar un vuelo barato a Casablanca: el cuscús. Realizado con sémola de trigo, se combina con vegetales cocidos y carne de ternera o de cordero. Otro de los platos que se debe probar antes de abandonar la ciudad es el tajine. Se trata de una especialidad a base de cordero y verduras que se sirve en un cuenco de barro, también llamado tajine, coronado por una tapa cónica, en el que la comida termina de cocinarse una vez que ha sido servida en la mesa. Como entrante, es recomendable probar la harira, la sopa de legumbres, tomate y carne.
Cómo elegir bien el momento de viajar
El clima de la ciudad es mediterráneo, aunque tiene una gran influencia de las corrientes frías que provienen del Atlántico. A la hora de reservar vuelos baratos a Casablanca es preciso tener en cuenta que hay muy poca variedad estacional en la temperatura. Noviembre y diciembre son los meses en los que se registra una mayor incidencia de precipitaciones, teniendo un total de 74 días, de media, con lluvia. Julio y agosto son los meses más cálidos, aunque las máximas raramente superan los 30 grados.
Horarios y precios de los autobuses desde el aeropuerto
Hay tres maneras de usar el transporte público desde el aeropuerto a la ciudad. En autobús, la compañía CTM realiza el trayecto con una duración aproximada de una hora. El primero de ellos sale a las 7:30 y el último a medianoche, con frecuencias cada hora y un precio de 85 dirham. En la planta -1 del aeropuerto hay una estación de trenes que conecta con el centro de la ciudad, y su horario es ininterrumpido entre las 6:50 y las 22:50, con un trayecto cada hora, y 30 minutos de duración. Existe además una parada de taxis; el precio del trayecto es de 200 dirham. También hay varias compañías de alquiler de coches sin conductor.
Marruecos en un vistazo
Aunque Marruecos es un país formalmente aconfesional, la religión musulmana impera en todo su territorio, y además tiene influencia en todos los aspectos de la sociedad y la economía. El idioma oficial es el árabe, aunque las lenguas están muy fragmentadas, y en el norte del país son cooficiales las lenguas bereberes, así como otros dialectos. El francés está muy extendido, y una gran parte de la población entiende el español. Se trata de un monarquía constitucional, donde el rey tiene grandes atribuciones. El país cuenta con 33 millones de habitantes, y la moneda oficial es el dirham.