Oslo y alrededores. La capital noruega es un hervidero de planes culturales, en la que no faltan las escapadas a la naturaleza: tiene salida directa a su propio fiordo y está rodeada de bosques. Prueba sus saunas flotantes, visita uno de sus destinos artísticos, pasea por sus parques o descubre una de las bibliotecas más bonitas del mundo.
Bergen. En la segunda ciudad más grande de Noruega encontrarás monumentos y barrios Patrimonio de la Humanidad, –recuerda el nombre de Bryggen–, restaurantes excepcionales, y una naturaleza colindante sobrecogedora. Aprovecha para adentrarte en una ruta por el Sognefjord o «fiordo de los sueños», el más profundo y largo de Noruega.
Stavanger. Parada obligatoria de muchos cruceros, aquí las casas de madera, los restaurantes con estrella Michelin y el arte urbano conforman una atractiva postal. Por si le faltaran motivos para visitar esta ciudad multicultural, en sus alrededores se encuentra el fiordo Lysefjord, y a 604 metros de altura, la famosa Prikestolen o «roca del púlpito».
Trondheim y la región de Trøndelag. Aquí se viene, entre otros, a comer –fue nombrada Región Europea de la Gastronomía en 2022– y a descubrir parte de la fauna y paisajes del centro del país en las montañas de Dovrefjell. Para reponer fuerzas, elige las acogedoras cafeterías y los excelentes fogones que esconde la ciudad universitaria de Trondheim.
Tromsø. Es conocida como la capital del Ártico, el destino perfecto si quieres ver auroras boreales, avistar ballenas o ver el sol de medianoche. Tampoco pierdas la ocasión para conocer la cultura sami, pasear en trineo de perros, pasar la noche en un hotel de hielo o practicar esquí de travesía.
Islas Lofoten. Prepárate para un paisaje de cumbres nevadas que emergen del mar, fiordos que esconden remotos pueblos de pescadores y un cielo que sigue regalando el espectáculo de las auroras boreales y el sol de medianoche. De la región no te pierdas tampoco Narvik –ideal para esquiar y hacer senderismo– o el pueblo costero de Bodø.
Geirangerfjord. La ciudad modernista de Ålesund es un punto de partida perfecto para explorar los fiordos del norte de Noruega. Recorre su canal principal en kayak, o adéntrate con él en el fiordo que le da forma. El Geiranger es el fiordo más popular de Noruega, una reliquia natural protegida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO que te sorprenderá con cascadas como la de las Siete Hermanas.
Andalsnes. En la misma región noroeste encontramos la capital noruega del alpinismo: Andalsnes. De sus alrededores, no te pierdas la carretera de montaña de Trollstigen o la excursión por el denominado «Camino de los Trols» o Trollveggen.
Islas Svalbard. Situadas en mitad del océano Ártico, estas islas ofrecen una experiencia en plena naturaleza incomparable. Aquí, a medio camino entre Noruega y el Polo Norte, te esperan exóticas actividades al aire libre. "